Ingredientes:
Bizcocho:
250 g de harina
200 g de azúcar
1 yogur natural
1 sobre de levadura química
2 cucharadas de cacao puro en polvo
una dósis (10 g) de colorante alimentario rojo en polvo
115 g de mantequilla sin sal
2 huevos
1 cucharadita de azúcar vainillada
el zumo de un limón pequeño

Cobertura:
400 ml de nata para montar
500 g de queso filadelfia
media cucharadita de azúcar vainillada
200 g de azúcar glass
Fresas opcionales. Las que se quieran ( y un poco de licor dulce para macerarlas)

Elaboración:
Se bate la mantequilla hasta punto de pomada, se añade el azúcar y la vainilla. Después se añaden los huevos de uno en uno para que no se corte la masa. Se añade la harina y el cacao y se bate bien hasta obtenr una masa homogénea. Por otro lado se bate bien el yogur con el zumo del limón. Se deja reposar 5 minutos, se añade el colorante y se mezcla con el resto de la masa.
Se coloca en un molde engrasado de 26 cm de diámetro y se hornea a 160 grados con calor arriba y abajo durante 45 minutos. Se saca cuando al pinchar el bizcocho el palillo salga limpio.

Se monta la nata. Después se añaden el resto de los ingredientes de la cobertura. Se mezcla bien para que el sabor sea homogéneo. Se mete en la nevera a enfriar media hora.

Cortamos el bizcocho en dos mitades. Colocamos una mitad en el plato en el que vayamos a presentar la tarta. Opcionalmente podemos colocar fresas troceadas encima de esta mitad. (se pueden macerar con licor dulce) Después cubrimos esta primera mitad con una buena capa de cobertura. Colocamos la segunda mitad encima y cubrimos con el resto de la cobertura. Opcionalmente adornamos con fresas.
Y ya está.
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